En este capítulo pretendemos realizar un aporte teórico a la formación de docentes, problematizando la enseñanza del área de Ciencias Sociales en Comunidades Socialmente Desfavorecidas. Reflexionamos sobre la finalidad de la enseñanza en el área para transitar hacia el debate de algunas ideas en torno a la enseñanza y el aprendizaje de las nociones de tiempo y espacio en un contexto de profundas transformaciones sociales. La hipótesis de nuestro trabajo parte de la premisa de que las escuelas de las comunidades socialmente desfavorecidas exigen docentes que sean idóneos en los aspectos pedagógicos, epistemológicos y conceptuales, pero que también cuenten con aptitudes especiales (reflexivas y críticas) para hacer frente a una realidad social compleja. Debido a la relación que tiene la escuela con el conocimiento, es el espacio apropiado para pensar sobre el estado de situación de la sociedad. Que los docentes puedan poner en palabras lo que es muy difícil nombrar, es un primer paso para evitar la parálisis que generan ciertos temas. Esto implica trabajar en el aula problemas sociales y reconocer que, aun en situaciones críticas, siempre existen márgenes de acción. En este sentido, las Ciencias Sociales tienen un papel importante en la reflexión acerca de quienes somos y qué tipo de sociedad queremos. Para ello consideramos que la premisa de base en la formación de nuestros alumnos debe ser el “cambio social” a través de la educación.