Que no padecemos muchos discursos sino demasiados pocos es una certeza y una contradicción en esta era de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación (TIC´s). Estas tecnologías se nos presentan en la actualidad de manera idílica, como una herramienta en pos de la igualdad, la libertad, la participación y la transparencia. En síntesis, la utilización de las TIC?s es para la obtención de una mejor calidad de vida del conjunto de las personas, se argumenta. Por otro lado la segmentación y separación es cada vez más marcada entre los sectores incluidos en el desarrollo tecnológico y la población excluida de dicho desarrollo. El discurso de las TIC?s se muestra como neutral, avalorativo y automático, pretende evitar la reflexión sobre él, dado que está enmarcado en el único camino posible para el desarrollo económico. Este trabajo hace hincapié en la necesidad de reflexionar sobre el progreso científico y técnico y las políticas. Si entendemos que esta última tiene por objeto: ofrecer a las actividades científicas los medios y más óptimos para su desarrollo dentro del proceso global de la sociedad (Albornoz 2001). Esto nos abre innumerables problemáticas. Acá describiremos el sistema científico-tecnológico argentino, el abordaje de las posibilidades de nuevas formas de hacer política, las relaciones que en ellas aparecen; por último, rescataremos la idea de formación y utopía para pensar iniciativas de un sistema cultural para el progreso científico y técnico, desde posiciones no dominantes.