Existen en nuestro país una cantidad de organizaciones no gubernamentales abocadas a la problemática de la vivienda en el Gran Buenos Aires y otras ciudades del país. Las mismas son heterogeneas en lo que respecta a su filiación institucional, escala de operaciones, estructura interna y tipo de actividades que realizan. Con el pasar de los años, el impacto de las actividades de estas organizaciones puede ser adecuadamente ponderado al observar los resultados materiales (viviendas, calles, cloacas, micro-emprendimientos, etcétera) pero también prestando atención a la gran cantidad de organizaciones comunitarias generadas y sostenidas por la misma. Madre Tierra es una reconocida ONG especializada en temas de habitat que opera en el oeste del Gran Buenos Aires. Fue fundada en 1985 por un pequeño grupo de profesionales en el ámbito de la Diócesis de Morón; hoy en día esta asociación civil autónoma mantiene una relación cercana con la Iglesia Católica y emplea a 18 profesionales, en su mayoría trabajadores sociales y arquitectos, tanto a tiempo parcial como completo. Se especializa en el desarrollo de nuevos barrios para la gente sin techo así como también en la consolidación de asentamientos, en su mayoría en los municipios de Morón, Merlo y Moreno. Desde su creación, Madre Tierra ha asistido a 1040 familias en la construcción de sus propias viviendas en nueve barrios nuevos desarrollados por ella. A su vez, ha colaborado con numerosas organizaciones comunitarias para ayudar a la gente a conseguir la propiedad de la tierra donde viven (aproximadamente 1790 familias). Durante las últimas dos décadas, esta organización ha estado íntimamente relacionada con los orígenes y el desarrollo de las ONGs abocadas a problemáticas de la pobreza en la Argentina. Es por esta razón, que sus transformaciones, composición y metodología son relevantes para entender las ONGs de este tipo. Los temas de identidad y las opciones históricas concernientes a las actividades y organización seguidas por Madre Tierra son temas centrales en este camino. La metodología que esta ONG ha desarrollado para trabajar con los pobres constituye su mayor aporte organizacional. Este “know how” organizacional es considerado por sus miembros como el resultado del aprendizaje de muchos años de compromiso sostenido con los pobres sin techo.