Luis César Amadori fue un importante director, productor y guionista de cine y teatro. Su vida estuvo marcada por el tópico del viaje desde temprano: nacido en 1902 en Pescara, Italia, de pequeño emigró con su familia a la Argentina. Aquí creció y se desarrolló profesionalmente, ampliando además su formación a través de experiencias en el exterior, tanto en el ámbito teatral como cinematográfico. En 1956, motivado por cuestiones políticas y gracias a las posibilidades laborales que le ofrecía España, se radicó en ese país ibérico. De esta manera, podemos pensar en los viajes de su infancia, juventud y adultez como marcas identitarias que lo formaron en tanto personalidad artística. Al mismo tiempo, a partir de la utilización de ciertas matrices narrativas (en particular, el melodrama) y de estrellas como Zully Moreno, Palito Ortega, Arturo de Córdova, María Félix o Sara Montiel en su producción fílmica, es válido pensar la obra de Amadori como un caso paradigmático del cine transnacional. En este trabajo, intentaremos un acercamiento a la propia mirada que el director tuvo sobre sus viajes a partir del análisis de algunos documentos de su legado personal (diarios de viaje y fotografías).