En las últimas décadas, profesionales de distintos ámbitos y movimientos sociales han comenzado a cuestionar la norma que divide a las personas en dos únicos fenotipos, macho y hembra. El objetivo de este ensayo es ofrecer un análisis queer que evidencie los presupuestos teóricos implícitos en ciertos discursos de la psiquiatría que establecen diferencias dicotómicas entre los sexos, y analizar su influencia en el campo académico y profesional, y en el imaginario social. A través de dos textos de medicina psiquiátrica pretendo mostrar y ejemplificar la forma en que ciertos discursos médicos logran construir un modelo de concepción de la norma del dimorfismo sexual y la heterocisexualidad como naturales. Dicha naturalización retroalimenta las condiciones materiales que violentan a las personas que no las encarnan. Cuestionar tales supuestos y sus consecuentes relaciones de poder en las instituciones nos permite contribuir a su transformación, entendiendo que este ejercicio teórico es relevante para el diseño de políticas públicas y programas educativos. Teniendo esto en cuenta, resulta fundamental la consecución de las investigaciones en este campo de estudio, con el foco puesto en comprender de mejor forma los mecanismos de poder que ejercen las instituciones y buscar, en consecuencia, soluciones posibles a estas asimetrías estructurales.