Atención

Búsqueda avanzada
Buscar en:   Desde:
La escuela hoy, más allá de relojes y paredes
Márquez, Mariana - Instituto Glaux.
Menarguez, Víctor - Instituto Glaux.
Bordoni, Mariana - Instituto Glaux.
González, Laura - Instituto Glaux.
III Congreso Internacional de Ciencias Humanas. Escuela de Humanidades, Universidad Nacional de San Martín, Gral. San Martín, 2024.
  ARK: https://n2t.net/ark:/13683/esz9/kWK
Resumen
La escuela es un territorio mutante, cambia de forma, se amplía. Los antiguos formatos escolares se van rompiendo gradualmente, sin llegar a emerger en forma clara una nueva escuela. Este tema es objeto de debate a nivel mundial: ¿qué escuela?, ¿para qué adolescentes?, ¿para qué mundo? Si bien estas preguntas no son nuevas, la post-pandemia las hizo resonar con más fuerza. En este regreso no podíamos volver al punto inicial porque el punto inicial se había diluido. Ahora llegaba el momento de preguntarnos, inexorablemente, por el nuevo rumbo: ¿hacia dónde ir? ¿de qué modo? Obviamente que estas preguntas no pueden sustraerse de las complejas características de incertidumbre, aceleración y tecnologización propias de los tiempos actuales. Ante lo incierto, concebimos a la escuela como un lugar de resistencia que, aún sin certezas, entiende que es necesario sostener y reforzar lazos a través de una energía colectiva y consciente, en contraposición al desánimo dominante. Pensamos también que la escuela debe ser el lugar de la desaceleración; de dar tiempo a los procesos, de “perder el tiempo” en proyectos valiosos, de detenernos para escuchar y elegir qué rumbo tomar. La escuela debe resolver así la tensión entre dos modos de concebir el tiempo: ¿seguir obedeciendo al tiempo cronológico (y tiránico) de Cronos o entregarse al tiempo cualitativo de Kairós? En una época dominada por las redes sociales, en las que las relaciones se caracterizan por la intensificación infinita de la información y, por estar mediadas por dispositivos, a contramano de esto, en la escuela, seguimos apostando por la presencia de un otro como clave para el crecimiento, por la construcción colectiva y por la empatía como valor que sostiene el mundo en el que nos reconocemos como seres humanos. Con estas premisas, y retomando las preguntas iniciales, coincidimos con muchos especialistas cuando imaginan la escuela post-pandemia como un espacio abierto, que vaya más allá de los límites del aula; donde se estimule el trabajo en grupo, con incorporación de herramientas digitales; y con un equipo docente que trabaje en forma colaborativa con una mirada multidisciplinaria. Se impone entonces, en palabras de Mariana Maggio, dar un salto hacia adelante, animándonos a seguir desestructurando los formatos escolares tal como tradicionalmente fueron organizados. Entonces, entendemos que el desafío es ir encontrando grietas por las que se pueda ir gradualmente “rompiendo relojes y paredes” y haciendo lugar a aquellas prácticas y proyectos que mejor nos permitan cumplir con la función de la escuela tal como la concebimos: el encuentro intergeneracional que posibilita la transmisión y la renovación del mundo común. Con proyectos tales como Derecho a la Identidad, Eso que me mueve o la Semana Loca intentamos sacudir la escuela y abrir nuevos espacios/tiempos para el aprendizaje.
Texto completo
Creative Commons
Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons.
Para ver una copia de esta licencia, visite https://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/4.0/deed.es.