Como parte de su normativa institucional, las escuelas de alternancia se proponen como espacios para la toma colectiva de decisiones entre comunidad y Estado, lo cual recibe el nombre de co-gestión. Esta conformación institucional se relaciona con los orígenes de estas escuelas, ligados a la movilización de familias campesinas que reclamaban por una educación que respetara las formas culturales de la vida rural. De esta manera las escuelas de alternancia proponen un espacio para la acción colectiva de las familias, a través de su participación en la toma de decisiones. La propuesta de este trabajo es analizar, a partir de la normativa institucional de estas escuelas, la forma en que se pensó ese espacio de tomas de decisiones por parte de las familias para articular, en un segundo paso, ese ideario con las prácticas concretas que caracterizan a la co-gestión en una escuela de alternancia de la provincia de Buenos Aires. Para esto nos preguntamos: ¿cuáles son las potencialidades y limitaciones de la participación de las familias a través de la figura de la co-gestión? ¿De qué manera influyen diversas dimensiones sociales y lingüísticas propias de los miembros de las familias en las posibilidades efectivas de tomar decisiones? ¿Cómo se reconfigura el ideario original de la co-gestión en las prácticas concretas de tomas de decisiones?