La estructura en red se relaciona con el desarrollo de nuevas formas organizacionales, que no implica sustituir las tradicionales, dado que pueden ser complementarias. Es por ello que el rasgo distintivo es la variedad de nuevas formas de organización, al no existir necesariamente una forma de organización dominante. Este modelo se define como un conjunto organizado de relaciones entre unidades de trabajo autónomas o semiautónomas para entregar un producto o servicio a un cliente, pudiendo distinguirse tanto redes internas como externas. Por su parte, los clusters implican una concentración geográfica de empresas interconectadas con proveedores especializados, proveedores de servicios, empresas de sectores relacionados y de apoyo que compiten pero también cooperan entre sí. Se analizan los eslabones de la cadena de valor, así como eslabones laterales y otros actores como el estado, cámaras empresariales, centros de información y conocimiento, entre otros. Uno de los aspectos de esta investigación, tomando como caso de análisis el cluster de ciruela industria es la relación entre el modelo estructural en red y la conformación de un cluster, en cuanto a si comprende una estructura de este tipo y el análisis de sus características particulares, todo esto en un marco de sustentabilidad organizacional en el que se ven interpelados los tradicionales paradigmas de gestión. La estructura red puede analizarse tanto desde el punto de vista interno como externo. En este último caso priman las relaciones interorganizacionales que de por sí implican un proceso de descentralización frente al modelo clásico de integración vertical en la cadena de valor, combinando por tanto relaciones funcionales como de mercada, traspasadas por las relaciones horizontales.