El sistema universitario es actor principal en su contribución a una estrategia de desarrollo económico y social y como tal, su intervención en la formación y el desarrollo de competencias profesionales en los jóvenes resulta esencial frente a la aceleración de los cambios en el mundo del trabajo en el siglo XXI. En este sentido uno de los mayores desafíos es, y será el entendimiento de los nuevos contenidos del aprendizaje más allá del tradicional puesto de trabajo calificado ante la emergencia de nuevos sujetos laborales y nuevas subjetividades en la mundo laboral. Un reciente documento de la CEPAL (2022) destaca y propicia el rol estratégico que vienen asumiendo las universidades de la región desarrollando programas cortos de orientación técnica y profesional. El documento resalta, además, los impactos positivos que de ello derivan, principalmente la menor duración de los cursos y la posibilidad de articularse con otras instancias formativas de mayor complejidad por su estrecha vinculación con el mercado de trabajo. En trabajos de UNESCO, (2012) sobre educación post - secundaria técnica se destaca que las expectativas de los jóvenes se centran también en desarrollar carreras cortas apuntadas a nichos ocupacionales mas precisos. Asimismo, y sobre modelos institucionales de educación superior técnica/tecnológica, la UNESCO, (2012) destaca esfuerzos en algunos países de la región para fortalecer opciones de corta duración con clara orientación practica y vocacional. La puesta en marcha del Programa Universitario de Escuelas de Educación Profesional en 2021 a través de la Secretaria de Políticas Universitarias - SPU -constituye una propuesta orientada a impulsar la formación profesional y trayectos formativos de corta duración y pregrado en las universidades, ampliando así su base de ofertas tradicionales como estrategia de inclusión de jóvenes que no pretenden contar con una carrera tradicional de grado, pero si adquirir saberes calificantes que mejoren sus oportunidades de inserción laboral. El programa se presentó con metas de corto y mediano plazo, comenzando por: i) el fortalecimiento de las capacidades institucionales de las universidades para el desarrollo de este tipo de ofertas formativas, ii) el diálogo con los actores del mundo del trabajo en cada región/territorio en donde se encuentran las universidades. iii) el fortalecimiento de los vínculos con el sistema de educación técnico - profesional en cada jurisdicciones provincial, y, iv) el estimulo a los estudios e investigaciones sobre prospectiva ocupacional y áreas de vacancia en los mercados de trabajo. En este trabajo se han revisado y sistematizado dos experiencias del Programa Universitario de Educación Profesional en universidades nacionales situadas en el conurbano bonaerense. En su desarrollo se ha intentado identificar fortalezas y debilidades en su ejecución, y fundamentalmente su avance en la consolidación de su institucionalidad dentro del sistema universitario.