Históricamente, investigadores de América Latina acuerdan en señalar las diferencias de género en el acceso y permanencia en el sistema educativo de nivel superior. En nuestro país, existen disparidades y contradicciones probablemente producidas por factores de desigualdad más generales. Entre ellas, las desigualdades por género inciden en la prolongación de los estudios y las posibilidades de mantenerse en el sistema educativo superior universitario hasta lograr una graduación. El presente trabajo se enmarca en el área de estudios relativos a la duración de los estudios más allá de los tiempos teóricos previstos en las carreras de grado del sistema de educación superior, destacando las diferencias entre la población masculina y la población femenina. Se observan los índices de masculinidad en varias cohortes de estudiantes de Abogacía de la Universidad Nacional de Córdoba, según los años de atraso en los estudios. Se trata de particularizar la información para reflexionar sobre la existencia de diferenciaciones de género que los grandes datos no permiten identificar. A fin de presentar los datos y desarrollar su análisis nos encuadraremos en un enfoque de género, entendiendo que el mismo incumbe tanto a varones como a mujeres. Por otra parte es claro que el tema de género exige profundizar en el escenario simbólico de las relaciones humanas y, más específicamente, en el de las relaciones de poder. Los datos cuantitativos que se utilizarán provienen del Área de Enseñanza de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales, el INDEC y el PMSIU.