En ambos casos, se trata de la demanda de un movimiento ?el de travestis y mujeres trans, por un lado, y el de personas con discapacidad, por el otro? por poder acceder al espacio público urbano en sus vidas cotidianas. Las causas y modalidades de la exclusión del espacio público difieren para ambos grupos sociales, pero los dos movimientos sociales resaltan y cuestionan los modos en que se produce el espacio público urbano. Ambos ponen de relieve que, a pesar de las definiciones clásicas del espacio público como sitio de y para ?todas las personas?, el mismo es efectivamente producido y regulado de un modo que (re)produce desigualdades entre los sujetos. Estos procesos de producción del espacio configuran un ?orden? respecto a quiénes se espera que aparezcan en el espacio público, y es dicho orden lo que ambos movimientos vienen a desafiar. En este sentido, los dos movimientos y las luchas que han llevado adelante por el acceso al espacio público urbano constituyen ejemplos de los modos en que este es objeto de disputa entre diferentes actores sociales.