Si bien es cierto que en algunos países de la región se cuenta con una estructura jurídica, au-nado a la creación de instituciones para la prevención, atención, sanción y erradicación del racismo y otras formas de discriminación; las poblaciones afrodescendientes continúan sien-do las más afectadas, vulnerables, discriminadas, excluidas y empobrecidas, siendo víctimas de la discriminación en los espacios públicos, la violencia por parte de los órganos de seguri-dad, y enfrentándose a las dificultades para el acceso a la justicia y la participación política. Son pocas las iniciativas y acciones implementadas con el objetivo de recoger y visibilizar sus intereses y necesidades, pero también actuar sobre ellas con el objetivo de contribuir a la erradicación de formas de violencia y discriminación. La población afrodescendiente conti-núa invisibilizada en las estadísticas de la región, no existen en los registros y datos de la ma-yoría de los países, por lo cual pudimos acceder a sus experiencias a través de la investigación testimonial.