El ambiente está compuesto por factores físicos, naturales y culturales, donde la condición de socioecosistema indivisible y complejo hace que el abordaje del territorio para el ordenamiento territorial y una posterior planificación se debe realizar de forma sistemática e integrada, donde las diferentes aristas del territorio deben ser contempladas y abordadas interdisplinariamente. El periurbano es un espacio de transición o ecotono entre lo urbano y lo rural, donde ambos se expresan y mezclan dando esta característica única del territorio. Si bien conceptualmente, se entiende como una periferia, casi concepto secundario de lo urbano, es de singular condición. La diversidad en estos sistemas aporta una estructura dinámica entre sus componentes, donde los recursos naturales son atravesados por aspectos culturales y proporcionan una mayor resiliencia y resistencia a las modificaciones. En el caso de las zonas periurbanas, el ordenamiento territorial debe permitir la convivencia entre los usos del suelo a fin de mantener los servicios ecosistémicos y la diversidad. El objetivo del presente trabajo es conocer las condiciones del uso del suelo en el periurbano de Villa María para establecer las bases para una futura planificación sustentable. Se establecieron las características principales de los 19 tipos de uso del suelo, así mismo, la actividad predominante es la agricultura extensiva, cubriendo casi el 40% de la superficie, seguido por tambos con el 21,33%. Estas dos principales actividades generan presión de diferente intensidad si son comparadas con las urbanas en función de los servicios ambientales, entre otros. Por otra parte las condiciones actuales del uso del suelo no son contempladas en las normativas, así como tampoco se dispone de herramientas que permitan la protección de las condiciones naturales o que preserven los servicios ambientales.