En "Decadentismo e ideologia: economias de desejo na América Hispánica finissecular", Sylvia Molloy (1993) demostró de qué manera (aparentemente tan poco evidente) habría operado un filtro lector del decadentismo en Hispanoamérica. Ese filtro bifurcó los sentidos. Por una parte, la aceptación del mensaje renovador poético y, por la otra, el rechazo de la escenografía y del proyecto de vida decadentes relacionados con la homosexualidad. Como ejemplos de ese proceso, en primer término, la lectura que Martí, en reseña para La Nación, en 1882, hace de una conferencia de Oscar Wilde en Nueva York y, en segundo término, la visión de Darío, en 1900, sobre la muerte del autor de “La balada de la cárcel de Reading”.