Esta ponencia esboza una propuesta de lectura de la producción académica sobre la experiencia de las universidades en la incorporación de la discapacidad tanto en lo referente a la presencia o participación de diferentes actores institucionales como de la inserción de contenidos en docencia, investigación y extensión. Programas y comisiones han ido surgiendo en los últimos diez años en las universidades de la región fundamentalmente con la misión de intervenir en las cuestiones que plantea el ingreso de personas con discapacidad – estudiantes, trabajadores docentes y no docentes - al nivel superior universitario. Se trata de espacios institucionales con diferente modalidad de trabajo, conformación de equipos que las integran, adscripción e inserción institucional. Tomando como un inicio posible la década del 90 cuando, con el impulso de los cambios que tienen lugar inicialmente en los niveles inicial, primario y secundario, es posible identificar experiencias que primero son inéditas y aisladas y, progresivamente, se van instalando en las universidades hasta conformar en la actualidad redes instituidas integradas por más de cincuenta universidades. Para identificar como estos movimientos se reflejan en la producción académica, se lleva a cabo una sistematización de las publicaciones que entre 1990 y 2019 dan cuenta de cómo irrumpen, se desarrollan, se instalan espacios específicos que asumen la temática de la discapacidad en las universidades. Esta organización de la lectura permite visibilizar hacia qué áreas y temas se orientan, qué intervenciones promueven y qué concepciones de universidad están implícitas en estas decisiones. También como incide un hito como la aprobación por parte de la Organización de Naciones Unidas del primer tratado de derechos humanos de este siglo, la Convención sobre los derechos de las personas con discapacidad. Se identifican producciones de los 90´que dan cuenta de experiencias dispersas con escaso arraigo institucional; de los primeros años de la década del 2000 centradas en los estudiantes con discapacidad y con lineamientos más orientados a lo asistencial y otras iniciando la segunda década que dan cuenta de experiencias más transversales. Son más escasas las producciones que refieren a espacios institucionales específicos con una perspectiva que tome en cuenta diferentes dimensiones de análisis. Esta propuesta de lectura de la producción académica permite sistematizar la experiencia de las universidades a través de lo que se visibiliza y lo que omite, así como también contribuir a organizar otra lectura, la de los recorridos institucionales desde una lógica de inclusión- exclusión (Pérez de Lara, 1998)