La discapacidad es un poderoso componente afectivo de los ensamblajes contemporáneos de promoción de estilos de vida saludable entre la población infantil. Mientras el discurso de “obesidad epidémica” domina la retórica de las políticas dirigidas al gobierno de las prácticas alimentarias y de actividad física, la fantasía de un futuro catastrófico de discapacidad producto de la obesidad parece ser crucial en su legitimación ética y política. Estos solapamientos entre obesidad, discapacidad e infancia son sustentados por un razonamiento biomédico especulativo: el sobrepeso y la obesidad en el presente de una niña o niño aseguraría un futuro de enfermedad y discapacidad durante su vida. Por lo tanto, el aumento de la prevalencia de casos de discapacidad producto de la obesidad infantil legitimaría en el presente que las generaciones más jóvenes sean dirigidas hacia el auto/control de los modos en que se alimentan y son alimentados. El objetivo de este trabajo es problematizar la composición discursivo-material y los potenciales efectos culturales de la política multisectorial chilena “Elige Vivir Sano”. Para cumplir con este propósito, este estudio plantea el ensayo de una cartografía del presente, de orientación deleuzoguattariana, dirigida a teorizar parcialmente los enredamientos materiales e inmateriales que condicionan, ordenan y legitiman las relaciones entre discapacidad, infancia y obesidad maquinadas por las políticas de vida saludable. Dos conceptos son utilizados como método para asistir esta cartografía: ensamblaje e hiperstición. Con el primero se mapean las condiciones de existencia de estas políticas sociales, así como los modos en que la discapacidad se transversaliza en su fundamentación científica y legitimación ético-política. Simultáneamente, con el concepto de hiperstición se examina cómo ciertas ideas científicas nacidas como meras especulaciones morales acerca del futuro de los cuerpos devienen verdades apocalípticas, con la capacidad de hacerse reales y acelerar la intensificación de las prácticas capitalistas de control corporal. La cartografía resultante expone un ensamblaje en que coinciden estimaciones estadísticas del coste financiero de la discapacidad, tecnologías para la medición de la actividad física, discursos moralizantes acerca de la bioquímica nutricional, prácticas de pedagogización del autocontrol visceral, y fantasías acerca de futuros de improductividad, pobreza y decadencia moral. En este presente, niñas y niños etiquetados como económicamente “vulnerables” y “en riesgo” son representados como biológicamente deficitarios, esencialmente inclinados a la glotonería y la pereza, y como amenazas para la estrategia nacional de superación del subdesarrollo. En tal escenario, la preferencia por cuerpos correctamente nutridos en el presente coincide con el rechazo a un futuro en que la discapacidad se hace ubicua en las sociedades y deshace la estrecha noción de humano moldeada durante el Capitaloceno. Finalmente, se presentan caminos alternativos para transitar este presente, en oposición al estrechamiento de las posibilidades para vivir en discapacidad presentadas y legitimadas por los discursos de vida saludable, y en favor de un futuro que rompe a través de las categorías esencialistas de identidad y propone la desintegración del régimen de capacidad corporal obligatoria que sustenta el orden capitalista contemporáneo.