La parentalidad positiva abarca aquellas competencias de los cuidadores primarios que promueven el desarrollo integral y bienestar de los infantes. Implican también la disponibilidad ante circunstancias de estrés, siendo un factor que amortigua los efectos de contextos adversos. En relación a esto, el contexto de pandemia por COVID-19 trajo aparejado problemáticas de salud mental y en las interacciones familiares. Se han evidenciado prácticas de crianza más severas, siendo de relevancia el estudio de estas acciones a lo largo de este periodo. Fue objetivo del presente estudio, evaluar longitudinalmente las diferencias de la parentalidad positiva entre el 2020 y 2021. Para esto, 34 cuidadores primarios de niños/as de 0 a 3 años contestaron el cuestionario de Parentalidad Positiva (EP2, Gomez y Muñoz, 2015) durante la fases agudas por COVID-19. Se encontró una disminución de las prácticas parentales positivas incluyendo las Competencias vinculares y las Competencias protectoras. En cambio, las Competencias formativas incrementaron en 2021. Estos resultados implican un aporte a entender la parentalidad longitudinalmente, y en particular en contextos de estrés, posibilitando la generación de medidas que fomenten competencias de crianza cálida y comprometida, ya que esto se asocia con un mejor desarrollo integral infantil. Palabras clave Parentalidad positiva - Competencias parentales - Infantes - COVID-19 ABSTRACT LONGITUDINAL STUDY ON POSITIVE PARENTING IN EARLY CHILDHOOD DURING THE COVID-19 CONTEXT Positive parenting covers those competences from primary caregivers that promote the integral development and wellbeing of infants. They also involve the availability of stress circumstances, being a factor that cushions the effects of adverse contexts. In relation to this, the context of the pandemic by Covid-19 brought mental health problems and family interactions. More severe breeding has been evidenced, so the study of these actions is relevant throughout this period. It was the objective of the present study, to assess longitudinally the differences of positive parenthood between 2020 and 2021. For this, 34 primary caregivers of children from 0 to 3 years answered the positive parenthood questionnaire (EP2, Gomez and Muñoz, 2015) during the acute phases by Covid-19. A decrease in positive parental practices was found including binding skills and protective competences. In contrast, formative competences increased by 2021. These results involve a contribution to understanding longitudinally parenting, and in particular in stress contexts, enabling the generation of measures that encourage warm and committed competences, as this is associated with a better integral Child Development. Keywords Positive parenting - Parental skills - Infants - COVID-19