Este artículo es una revisión teórica sobre el trabajo de cuidado no remunerado, categoría de análisis utilizada por la economía feminista y la economía del cuidado para dimensionar los aspectos no monetarios y subjetivos que inciden en las condiciones de bienestar de la sociedad. Tomando como referencia los desarrollos conceptuales y metodológicos en el área, se postula que las prácticas de alimentación realizadas en el ámbito doméstico familiar constituyen trabajo de cuidado no remunerado. La importancia de esta tarea doméstica para el sostenimiento de la vida humana, los sistemas de género que fundamentan su desempeño y las relaciones socio familiares en que se enmarcan, permiten caracterizar esta tarea como trabajo de cuidado y analizar su contribución al bienestar individual y social.